Mamitas, siempre se presenta la circunstancia que debemos salir de casa y no podemos amamantar a nuestros bebés, esa es una de las tantas razones por las que nos vemos en la necesidad de extraer nuestra leche para almacenarla para alimentar a nuestros hijos.
Para hacerlo de manera correcta lo mejor es que sigas estos tips que te vamos a dar a continuación, ten en cuenta que al tratarse de alimentos para nuestros bebitos debes lavar muy bien todos los utensilios que vas a usar.
Preparación
Antes de extraer la leche es recomendable masajear muy bien el pecho. Hay muchos factores que ayudan a producir oxitocina y a le eyección de leche, entre ellos el llanto del bebé. Cada mamá va descubriendo lo que mejor se adecúe.
Ten en cuenta tu comodidad
Contar con un espacio en el que puedas realizar la extracción puede ayudar a conseguir un poco más de leche. También debes buscar la posición en la que te sientas más cómoda. Recuerda, en estos casos tener una rutina puede hacer que tu cuerpo se acostumbre con facilidad.
La importancia del extractor de leche
A pesar que la extracción de la leche se puede hacer de manera manual, es recomendable hacerlo con un extractor de leche mecánico ya que con este se garantiza eficiencia y facilita mucho el proceso. Ten en cuenta que a muchas mamás nos da miedo estos artefactos por el ruido o la presión que hacen en el pecho, recuerda que ya han sido probados por otras mamitas y no hay nada que temer.
¿Cómo se guarda la leche materna?
Al momento de almacenar la leche es recomendable hacerlo directamente en los biberones o en potes de vidrio con cierre hermético, en estos guarda sólo la cantidad de que normalmente toma tu bebé. No te olvides escribir la fecha de extracción, para ir usando primero la leche más vieja.
Ten en cuenta que la leche materna no debe tener mal olor ni sabor agrio. Recuerda que congelar la leche destruye algunos anticuerpos, así que solo congela la leche solo si es necesario.
¿Cuánto tiempo se puede almacenar la leche materna?
Si la leche está fresca puedes usarla máximo 6 horas después de extraída, al refrigerarse su vida útil se prolonga por cinco días; en caso de congelarse puede usarse hasta por seis meses, pero pierde propiedades.
Por último, ten en consideración que la leche materna es insustituible, consulta a tu médico cualquier recomendación o sugerencia que te pueda hacer en caso que tengas que interrumpirla.